¿Por qué es importante experimentar una cata de vinos?
La asistencia a catas no solamente nos proporcionará un mayor conocimiento a experimentar, además ampliará nuestra cultura sobre el interesante mundo de los vinos que tan rica es en nuestro país.
Si queremos ser un experto en la cultura del vino se debe asistir a una cata, por ser experiencia recomendable en la que poder profundizar en las características y aspectos que nos descubren en ella los profesionales del sector vinícola. Según sea el tipo de cata, podremos descubrir nuevos matices en distintas clases de vinos, conocer las características únicas de las variedades de uvas, diferentes elaboraciones, evolución o particularidades de las añadas, etc. Se pueden dar tanta clase de información que es una oportunidad única para ampliar conocimientos.
Las distintas clases de catas
En un cata de un vino se compone de varias partes, por un lado, el hecho de disfrutar de un vino determinado, a la vez, a nivel sensorial, la vista, el olfato y el gusto entran en juego, en poco tipo de experiencias se pueden estimular los sentidos. Se pueden clasificar de esta manera:
Cata Horizontal
El tipo más ofrecido pues se basan concretamente en degustar vinos de la misma añada, o de una misma denominación de origen, para establecer diferencias como consecuencia del clima, el suelo, etc. A la hora de iniciarse e ir adquiriendo experiencia, es el tipo más recomendable.
Cata Vertical
La base de la cata es estudiar el mismo vino pero creado en diferentes añadas, lo interesante es comprobar al evolución dependiendo de las diferentes condiciones climáticas y cambios a la hora de elaborarlo, pues repercute en los matices que se dan en ese vino concreto en las diferentes añadas.
Cata Ciega
El nombre puede engañar, no es una cata con los ojos tapados, sino con las botellas cubiertas. Así se consigue que el catador no vaya con predisposición a juzgar los vinos antes de su cata. Al conocer información como el nombre de la bodega, el origen o la variedad de uva pueden determinar prejuicios ante una valoración final con objetividad.
Cata Comercial
Los aficionados y conocedores de la cultura del vino suelen participar en este tipo de catas. Una bodega, distribuidor o vinoteca busca una opinión de los asistentes a los vinos presentados, les sirve como test a la hora de conocer los vinos a destacar y recomendar.
Otro tipo de catas menos conocidas
Además de las catas más comunes, antes indicadas, existe la Cata Geográfica, una variante de la horizontal en la que se catan vinos de una misma zona. La llamada Cata Histórica donde se catan vinos diferentes y de distintas añadas para ver su evolución, una variante de la cata vertical. O la Cata Técnica guiados por un profesional vinícola, se realizan fichas de evaluación de los vinos por los asistentes.
Animarse a acudir a una cata es una buena idea para iniciarse en la cultura del vino, ganaremos conocimientos e impresiones, más que solamente probando una copa. Por otra parte, a los profesionales e iniciados les permite ampliar datos, pudiendo descubrir nuevas variedades, productos, regiones, elaboraciones que de otra forma no sería posible de manera tan completa.
Nuestras recomendaciones
Sobran los motivos para disfrutar de 1564 Viognier empezando por su atractivo color amarillo pajizo con matices verdoso; sus mil aromas a frutos blancos, tropicales en equilibrio con su frescor y denso, cremoso.
Este vino blanco tiene una maceración pelicular y posterior fermentación a baja temperatura (15ºC) seguida de una breve crianza en barrica bordelesa de roble francés hasta su embotellado.
Los últimos procesos del vino, clarificación, estabilización y filtrado antes de embotellar, son realizados de la manera más respetuosa posible, para conservar al máximo sus propiedades. Maridaje ideal para acompañar aperitivos, pasta, arroces, pescado, mariscos y carne de ave.
Pago de los balagueses combinación perfecta de 70% Garnacha Tintorera, 30% Merlot. Notas para una cata es que es un vino tinto de denso color granate, expresión intensa de frutos silvestres, compota de fruta negra muy madura, matices balsámicos con un suave tostado y especias de vainilla que se acentúan tras la aireación. De cuerpo medio con taninos suaves y flexibles, frutilla negra, acidez equilibrada en el paladar sostenido y prolongado.
Cuenta con el certificado ecológico cumpliendo los estrictos requisitos de la UE para la agricultura ecológica pues los rendimientos de esta variedad de uva fomentan la biodiversidad y la sostenibilidad, sin uso de pesticidas o fertilizantes químicos.